Conjunto de Antros
Eran los antros lugares de retiro espiritual para la devoción, pero que no tenían, función de habitación como las ermitas. Son de reducidas dimensiones, con un solo espacio interior cubierto por bóveda de medio punto y sobre él, cubierta a dos aguas. En su interior, bancos adosados a los muros laterales y altarcillo en el fondo, donde mediante azulejos e inscripciones se hacía referencia al Santo al que estaba dedicado. Se solían dedicar a Santos destacados por su penitencia. En la actualidad aún se conservan pero los azulejos han sido retirados al Museo del Convento para evitar desmanes. Se cita que entre el Convento nuevo y en antiguo existían tres dedicados a Santa María Magdalena, Santa María Egipciaca y Santa Eufrasia. En la entrada actual del Convento y protegido por cancela, ser conserva el de Santa Eufrasia, con figuras representativas de barro a tamaño natural, cerca de la ermita del Carmen, está el de San Franco de Sena. También, próximo a la ermita del Nacimiento, se conserva el de San Elías, y en las proximidades de la de Montserrat existe otro. Las fachadas son siempre de mampostería con un hastial curvo que les caracteriza. Puerta de acceso bajo arco de medio punto y revoque de mortero de cal. Algunos, los más antiguos, presentan alguna ornamentación de molduras de sillería.
En cuanto a su entorno, están situados en lugares discretos y agradables, rodeados de vegetación, y próximos a ermitas, forman parte del paisaje arquitectónico de este paraje.
La geolocalización de los elementos está en proceso de revisión.