Castellet de Abenaduf

Dades de protecció de l'inmoble

Secció

Primera

Classificació

Béns immobles 1ª

Categoria

Monument

Dades de Declaració

Tipus de Protecció

Declaración BIC genèrica GVA

Data Signatura Acte

11/06/98

Data Publicació DOGV

18/06/98 Vore DOGV

Data Publicació BOE

22/06/98 Vore BOE

Dades d' Entorn

Tipus de Protecció

Entorno de protección BIC genèrico

Data Signatura Acte

11/06/98

Data Publicació DOGV

18/06/98 Vore DOGV

Data Publicació BOE

22/06/98 Vore BOE

Dades d' Inscripció

Tipus de Protecció

Inscripción definitiva BIC Ministerio

Data Signatura Acte

14/08/01

N° Inscripció Ministeri

R-I-51-0010669

Tipus de Protecció

Inscripción definitiva BIC GVA Publicada

Data Signatura Acte

07/07/23

Data Publicació DOGV

18/07/23 Vore DOGV

Benaguasil fue poblado desde la Edad de Bronce, encontrándose yacimientos por todo el término municipal. También se encuentran restos de un poblado ibérico. Durante la época romana estuvo muy poblado, en relación con la importante ciudad próxima que había en lo que hoy es Llíria y son numerosos yacimientos los que continuamente aparecen en el laboreo de las tierras.
El lugar fue conquistado a los musulmanes por Jaime I, en 1238, quién la donó a Fernando Díaz. Posteriormente perteneció a Martín el Humano, y también a los duques de Medinaceli. Cuando, en 1525, Carlos I ordenó que se bautizarán todos los moros del Reino, los musulmanes de Benaguasil se levantaron en armas, y a ellos se unieron los de Bétera, Paterna, Villamarchante y Benisanó; en Benaguasil se concentraron todos, y la ciudad fue sitiada por las tropas reales mandadas por Jerónimo de Cavanilles, haciéndoles capitular luego de una resistencia de 5 semanas y castigándoles al pago de 12000 ducados.
En una pequeña colina dominando el río Turia a 124 metros, sobre el nivel del mar, se encuentran los restos de un torre islámica, la torre de Felx. Desde el lugar se divisa el vecino castillo de Villamarchante, al cual debió estar vinculada.
Los muros fueron construidos con tapial de mortero, utilizando además piedras ordenadas dentro del encofrado, situando su cara más plana o lisa paralela a la tabla. De esta manera en las zonas donde el muro ha perdido el enlucido final con que eran recubiertos, se asemejan a muros de mampostería.
Dada la tipología de restos cerámicos que aparecen en la superficie (cerámica islámica con y sin decoración, cerámica moderna) y la factura de los muros conservados, podría tratarse de una alquería islámica fortificada que formaría parte del cinturón defensivo de alquerías que protegían la ciudad de Valencia como las de Bofilla y Moncada, entre otras. Estas construcciones se componían de una serie de elementos, torre, albacar y recinto murado, que les daban un carácter fortificado. (C.Pérez-Olagüe)

Fotos