Cava de Cortés o Pou del Salt

El depósito no muestra construcción alguna en su aspecto exterior, por hallarse excavado integramente en una formación de tobas calcáreas (travertinos). Se identifica tan sólo una boca cenital superior, un ingreso o una galería de comunicación con el nivel inferior y una puerta o boca situada sobre el tercio superior, que aparece tallada en el paredón vertical del sustrato calcáreo. En la parte superior del depósito, sobre la cubierta y rodeando la boca cenital, se encuentra una edificación residencial de construcción reciente
La excavación antrópica ha perfilado un hermoso pozo de planta circular, de 15,30 a 16,30 m de diámetro y altura máxima de 12,50 m. Su capacidad de almacenamiento (hasta el nivel de la puerta lateral) se calcula en unos 2.500 m3. En las paredes interiores se observan áreas chapadas con mampostería, construidas para cerrar grietas o concavidades. A nivel medio se distinguen a modo de tres túneles o pequeñas aberturas que aparentemente están cegadas
La bóveda fue tallada sobre la toba calcárea y adopta forma hemisférica. La boca cenital facilitaría arrojar al pozo la nieve recogida del distrito superior. Desde la puerta S, situada a 12,60 m de altura respecto de la base del depósito, se desarrollaría una escalera adosada a la pared del cilindro, del cual sólo se observan los huecos que han dejado las maderas. Esta puerta se abre a nivel de un patio exterior contiguo a la finca (hoy casa de veraneo) y en la actualidad aparece tapiada dejando abierta una pequeña ventana. El acceso al nivel inferior se realiza descendiendo por una galería dotada de escalones, que comunica con otra galeria inferior en la que se abren pozos (de los que se ignora su funcionalidad), y en la que existe un túnel de comunicación con la base del depósito
La cava fue construida por el cantero -y posteriormente nevatero- Antonio Cortés. Las referencias documentales al respecto se inician en 1827 y concluyen en 1851

Croquis

Fotos

Plano