Espacio de Protección Arqueológica Testar del Molí (Olleries Majors)
Corresponde al segundo núcleo de alfarerías de Paterna, relacionado con las "Olleries Majors", citadas en la documentación medieval. Su nombre viene de la partida en la que se encuentra, la del Testar, en alusión a la abundante cerámica existente en superficie de forma tradicional, y al molino del mismo nombre, junto al que se desarrolla el yacimiento. A partir de intervenciones recientes conocemos que al menos se extiende por el S desde el Cº de Botjers, frente al molí de l'Escaleta, donde ha aparecido un horno del s. XIV-XV (2006) y por el N hasta el parque del apeadero de Sta. Rita, donde se halló una alfarería en uso desde finales s. XIII hasta s. XV, formada por 2 naves, 1 patio, tornos y balseta (2006). Pero el núcleo central se encuentra en la parcela situada al N de los molinos y frente a la actual nave de suministros eléctricos CES. En la urbanización en torno a esta última fábrica se hallaron estructuras correspondientes a una alfarería con tornos excavados en el suelo, zonas de almacenamiento y un horno, datada entre los s. XIV y XV, pero con niveles anteriores islámicos (2004). Los hallazgos más abundantes se efectuaron en las campañas ordinarias de este yacimiento, registrándose varias alfarerías dotadas de áreas de producción con tornos, de almacenamiento, balsas de decantación y de pudridero y hornos de distintos tamaños. Además se han recuperado ingentes cantidades de material cerámico que abarcan todas las tipologías cerámicas desde las bizcochadas y las vidriadas de cocina hasta las lozas con vidriado estannífero y decoración en verde y manganeso, en azul y en azul y dorado.
Se conoce y fue parcialmente expoliado desde el año 1907, por parte de anticuarios que llevaron a cabo excavaciones clandestinas. Estos primeros hallazgos sirvieron para dar a conocer la producción cerámica de Paterna de época bajomedieval y moderna, por parte de autores como M. González Martí, Folch y Torres o Guillermo de Osma. En la década de 1960 Alfonso Barberá impulsó de nuevo su estudio tras los hallazgos en el Testar del Molí de abundantes restos sacados a la luz tras la construcción de industrias del polígono de la Fuente del Jarro. No será hasta 1984 cuando se efectúen las primeras excavaciones arqueológicas, cuyos resultados fueron publicados por A. Barrachina, P. Carmona y J. Miralles. A partir del año 1985 se iniciaron campañas sistemáticas de excavación arqueológica hasta el año 1997, dirigidas por los arqueólogos Mercedes Mesquida y François Amigues. Recientemente se han efectuado intervenciones arqueológicas de urgencia que han permitido delimitar de forma más concreta el yacimiento.
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